Final del challenger de Meerbusch entre dos claros especialistas en la materia:

Si quitásemos a los 50 mejores jugadores del ránking, seguramente nos encontraríamos a pocos jugadores con tanta calidad para jugar en tierra batida como estos hombres: el austriaco Haider Maurer, vive el mejor momento de su carrera: tras años en el circuito challenger sin poder competir regularmente en los torneos ATP, sus grandes actuaciones en estos torneos menores, le han abierto las puertas de disputar muchos torneos ATP sin necesidad de disputar las fases previas. El año pasado en esta misma semana ocupaba el puesto 111, y un año después, se encuentra 50 puestos más arriba: la delgada línea entre ser cabeza de serie en challengers, o poder acudir a torneos ATP directamente.

A mediados de mayo, llegó incluso a colocarse en el puesto 47, pero el deseo de competir en Wimbledon, le hizo disputar la temporada de hierba, ganando solo uno de los cinco partidos que disputó. Está viviendo, como digo, un gran año, habiendo disputado unas semifinales del ATP 500 de Rio de Janeiro (perdiendo contra Ferrer) , cuartos en Umag, cayendo ante Thiem, y ahora en su vuelta al circuito challenger, buscará su primer título del año.

Por su parte, Berlocq lo encontramos en la situación opuesta: su ránking baja y baja: llegó a ser número 37 del mundo en 2012, y siempre en el Top 100 desde 2010, cayó en mayo de este año al puesto 101. Ahora mismo ocupa el 151º puesto de la clasificación, y no pasa por su mejor momento: despedía el año en forma ganando el challenger de Porto Alegre, pero en 2015 tiene un balance de 12-11 (8-11 antes de este torneo) sobre tierra batida. Unos números pobres para un jugador que ha llegado a ser lo que es Charly en tierra batida.

Céntrandonos en el torneo, ambos jugadores han alcanzado la final rotundamente, cediendo un solo set en el torneo, y ambos en la primera ronda. Creo que ahora mismo Haider Maurer es superior a Berlocq, y si ambos juegan al 100%, el austriaco debería llevarse el partido, y por tanto el título.